Según el arqueólogo e historiador Román Hereter, las especias han sido desde hace miles de años un puente entre Occidente y Oriente; formaron parte de las rutas comerciales más importantes de la historia, y han participado en el movimiento de los pueblos, la creación y desvanecimiento de reinos e imperios.

Y nosotros aquí, pensando en el pastel de chocolate y jengibre de Chema.

En este post, te contaremos un poco de la historia de las especias y cuáles eran sus muchos usos aparte de como condimentos en la cocina.

Comercio de especias

Nos situamos alrededor del 3000 a.e.c., cuando aparecen las primeras rutas comerciales desde Oriente a Occidente. Se ha descubierto, de todas formas, que las especias ya se utilizaban en el Neolítico. Las especias fueron parte importante de este y otros muchos comercios a lo largo de la historia. Se trasladaban desde China hasta la India, y viajaban por todo el Mediterráneo, siendo estas tres regiones las principales productoras y exportadoras de especias. 

Comerciantes árabes y el pueblo fenicio llevaron las especias por Europa oriental y el Mediterráneo.

Hierbabuena, cardamomo, canela, nuez moscada, jengibre, clavo…

Más adelante, con los griegos y los romanos, el comercio de las especias se incrementó; se crearon nuevas rutas, y ciudades en lugares estratégicos para fomentar los intercambios.

La Ruta de la Seda llevó plantas asiáticas a Europa. El Imperio Romano extendió el comercio de la pimienta en Occidente. Y el descubrimiento de una ruta marítima hacia la India ayudó a que este intercambio y viaje de especias siguiera su curso.

En la historia del comercio de las especias, no siempre hubo intercambio cultural y de productos. Con el descubrimiento de América, aparecieron los monopolios y la búsqueda de las rutas más baratas, el contrabando, la esclavitud, la plantaciones de especias y plantas fuera de sus lugares de origen. El comercio de las especias en el siglo XVIII se utilizó cómo una estrategia de los países e imperios para coronarse los más poderosos.

Usos de las especias

Además de su uso para condimentar y conservar los alimentos, en el Antiguo Egipto se usaban como cosméticos y para los embalsamientos; en Grecia y Roma, tenían uso en ceremonias religiosas y en la medicina.

Entre los primeros escritos se han encontrado evidencias de la utilización de especias, tanto para los alimentos como para cosméticos y remedios medicinales. 

Las especias eran muy preciadas, y no solo antes de la caída del Imperio Romano, sino durante la Edad Media hasta el siglo XVIII. En la época de las Cruzadas, su valor era comparable al de las joyas, y durante muchos siglos se consideró que tenían propiedades mágicas.

El jengibre

Queríamos dedicarle un apartado especial al jengibre, a propósito del pastel.

El jengibre se obtiene del rizoma de una planta del mismo nombre, originaria de Asia tropical, aunque actualmente se cultiva en todo el mundo, especialmente en la India, en países africanos y Jamaica, entre otros. Tiene una forma particular, que parecen brazos o protuberancias, y un sabor picante pero ligeramente dulzón. 

Ha sido una especia importante en la medicina desde tiempos milenarios, y sigue empleándose a día de hoy para este uso.

En la cocina, ha sido muy importante condimentando carnes y curries en China y la India, pero también en Occidente se usaba como condimento: en la Antigua Roma pagaban altos impuestos por adquirirlo, por ejemplo. Ya en la Edad Media y el Renacimiento europeos se daban cuenta de sus propiedades curativas, además de usarse en la cocina: se usó para aliviar los vómitos, fortalecer el estómago y tratar la impotencia, como afrodisiaco, entre otros. En la India el jengibre es usado para los dolores.

El jengibre se emplea también para la elaboración de bebidas, como el ginger ale, y para hacer tés e infusiones. Tanto en recetas saladas como en dulces, como las galletas. Y los pasteles, sí.

No solo se ha consumido el jengibre en polvo o en rodajas, seco o fresco, además, se pueden hacer con él lociones para aplicarse en la piel, y dicen que funciona contra el reumatismo.

Ahora que se te ha abierto el apetito pensando en los múltiples sabores que hay, solo te queda pasarte por Donde Chema y pedir esa paella y el suculento pastel de chocolate y jengibre.

Foto de freepik en https://www.freepik.es/